El acto puede ser representado por un solo actor frente a un espejo o con otro detrás de un marco, simulando ser su reflejo.
El actor se para frente a un espejo y al observarse exclama:
- !Que tal campeón, que bien se te ve! -
sonríe
Deja de sonreír y se aproxima un poco más, entonces el reflejo le pregunta.
- ¿Bien, realmente te ves bien?
- Bueno, es indudable con lo que veo.
- ¿Pero qué es lo que ves?
- Por favor, no preguntes estupideces, me veo a mí mismo.
- ¿Estás seguro de verte a vos mismo?
- Absolutamente, no tengo dudas que lo que veo soy yo, ¿como se te ocurre preguntarlo?
- Tengo mis dudas y honestamente es la única explicación que encuentro.
- ¿Dudas, explicación?, discúlpame pero no te entiendo.
- Seguro, es más fácil no entender.
- ¿De que estás hablando?, no hay nadie más aquí, solo yo parado frente a este espejo y -con tono burlón- salvo que me haya vuelto loco, vos sos mi reflejo, es decir yo mismo.
- Supongamos que es correcto lo que afirmas, ¿podés explicarme entonces por qué me mentís?
- ¿Como que te miento?
- Sí, me mentís constantemente y no me parece razonable que lo hagas si estás tan seguro de que yo soy vos, ¿que sentido tiene mentirse a sí mismo?
- Yo no me miento, es absurdo, ¿como podría engañarme a mí mismo?
- Absurdo es que lo hagas y ni siquiera tengas consciencia de ello.
- Pero no digas pavadas, jamás me he mentido, esto es estúpido.
- ¿Comienzas a ponerte incómodo?
- Incómodo yo, por favor, no hay razones.
- ¿Seguro que no las hay?, porque yo te podría recordar unas cuantas -hace comillas con los dedos- "razones".
- Tomátelas, estoy divagando, ahora mi reflejo me critica -exclama sarcástico.
- Bueno, sino te la bancas me hago el boludo como siempre y así seguimos, total el problema es tuyo.
- Pará, pará, ¿qué es lo que no me banco?
- La verdad, eso es lo que no te bancas, pero quédate tranquilo, le pasa a casi todos.
- ¿Que verdad no me banco?
- La verdad, toda la verdad, la absoluta e insoportable verdad.
- ¿De qué carajos estás hablando?, yo me manejo con la verdad, con mi verdad, todo el mundo puede ser hipócrita, pero yo no.
- Claro, claro, ¡con tu verdad!, esa que esconde tu hipocresía y todas tus otras miserias.
- Yo no escondo nada y mucho menos de mi mismo.
- Lamento contradecirte y te lo puedo demostrar. Una de tus frases favoritas, al momento de hablar de la mujer de un amigo, es decir: "Para mí, las mujeres de mis amigos tienen bigote", pero bien que le tiraste los perros a la mujer de Juan, quien admito está re fuerte y pinta gatito, pero por lo menos no digas esa estupidez con tanta convicción ¿o Juan no es tu amigo y por eso le sacaste los bigotes a su mujer?
- Fue un momento de debilidad, pero ya pasó.
- Pasó porque no te dio bola, sino te la hubieses garchado como a la mejor, caradura.
- Lo admito, me equivoqué, ¿estás conforme?
- Boludo, soy tu reflejo, vos debes estar conforme. Ahora y cambiando de caso y miseria, ¿te acordás de la cometa que agarraste para favorecer a esa empresa en tu laburo y que pensaste que eras un piola bárbaro y que bien la hiciste?
- Bueno, pensá un poco, todo el mundo manotea lo que puede.
- Puede ser y también puede ser que todos piensen que son honestos, como lo pensabas vos y lo gritabas a los cuatro vientos, pero claro, nunca habías tenido una oportunidad de poner a prueba tu "honradez" y te cuento...reprobaste!!!
- Bueno, esas son tonterías, nada realmente importante, yo, dentro de todo, me comporto lo mejor que puedo.
- Lo mejor que puedo, si, si, sobre todo cuando disimulas tu envidia, cuando por ejemplo tu primo se compró ese auto de alta gama.
- No viejo, yo lo felicité y me alegré por él, ahí te equivocas feo.
- Me equivoco feo, chanta, si te dolió el estomago cuando lo viste y lo primero que pensaste fue: "que culo que tiene este puto, se le dan todas fácil", no te olvides que a mí no me podés engañar.
- Pero yo no soy mal tipo, solo me da bronca que otros tengan más suerte que yo.
- ¿Y como llamarías eso entonces?, mira, no quiero ser muy verdugo con vos y menos ahora que estás algo confundido, pero hay más, muchos más.
- No sé, no creo, tengo muchas virtudes también.
- Si, seguro, como tus conocimientos. Recuerdas cuando fuiste a la exposición de cuadros, pero antes habías googleado a varios artista porque no tenías ni idea de quienes eran y en la misma, con una fingida humildad, opinaste sobre las obras y agregaste tus "profundos" conocimientos del tema, para impresionar a todos y lo feliz que estabas al lograrlo.
- Pero che, me vas a joder con todo, yo no maté a nadie.
- Es cierto, no mataste a nadie, pero tuviste deseos de hacerlo y no lo hiciste porque no tenes los huevos para hacerlo, porque también sos un cobarde, a ver si porque cagaste a trompadas a ese pobre infeliz te crees valiente, el neneque no tenía oportunidad de ganarte y lo sabías.
- Fue una pelea justa.
- Justa a tu medida, querrás decir, con la victoria casi asegurada.
- Mirá, seguí rompiéndome las pelotas y te juro que no te hablo nunca más.
- Calmate, sé que es muy jodido enfrentarse a uno mismo, pero también sé que de tanto en tanto es necesario, por tu bien, para que trates de ser una mejor persona.
- ¿Mejor persona?, ya te dije que soy buena persona y mucho más comparado con los demás. El mundo está lleno de mala gente, gente de mierda.
- En eso también tenés razón, pero hay mucha gente buena, mucho más buena que vos.
- ¿Y a mí que e importa si hay mejores que yo?
- Si te importa, te gusta aparentar ser mejor que los demás, aunque no en determinados aspectos, como en la bondad, eso no es muy importante para vos.
- No soy un santurrón, ni un mediocre.
- Nadie dijo que fueras un mediocre, bueno, nadie no, vos lo hiciste. No creo que alguien se considere mediocre, ni aún los que por alguna razón lo admitan públicamente. En realidad es una actuación para diversos fines, pero en la intimidad no lo creen y si lo creen, se engañan para que no sea así.
- Se está complicando un poco esta conversación, tiene matices de filosofía barata y zapatos de goma.
- No me culpes a mí, tu no eres psicólogo y yo soy solo tu reflejo, por lo que no puedo ser lo que tu no eres.
- Pero me cuestionas.
- Para nada, no soy yo quien te cuestiona, tu lo haces por mi intermedio y eso es un buen principio... creo.
- Empiezo a reconocer algo, no es muy alentadora esta conversación para mi estima y de última, es preferible causar envidia a dar lástima en este mundo plagado de miserias.
- Totalmente de acuerdo, pero...las miserias de los demás no minimizan las propias, salvo que pienses que no ser la peor mierda te exonera de tu poca mierda.
- Tampoco soy una mierda, tengo defectos como todos y quizás menos.
- Ahí estamos de nuevo, nos pensamos mejores de lo que somos y lo más gracioso es que todos lo hacen o por lo menos eso creo.
- Seguramente, pero de lo que no estoy seguro es que todos se interpelen a sí mismo como lo hago yo, porque al fin y al cabo hay que tener coraje para hacerlo, coraje y honestidad, dos cosas no muy abundantes en este mundo.
- Nuevamente de acuerdo y comienzo a fastidiarme con tantas coincidencias, me hacen dudar de mí o nuestra sinceridad, ¿no nos estaremos engañando otra vez?
- Probablemente nos estemos mintiendo una y otra vez, porque es la única defensa que tenemos contra nosotros mismos. La verdad, como dijimos, es insoportable y nos destruiría con facilidad, termino creyendo que mentirnos es una forma de tenernos piedad.
- Fantástico, no tenemos mucha piedad para con los demás, pero si somos piadosos con nosotros mismos, ¿no te suena algo egoísta?, egoísta empieza con ego, ¿te dice algo?
- No, no me dice nada y esto de hacerme preguntas para responderme, me hace dudar de mi cordura.
- Olvídate, casi todos hacen esto, no sé si son tan duros, pero en algún momento de sus vidas, seguramente, hablan con su imagen, aunque no todos reconocen que lo que ven no es lo que quisieran ver.
- Entonces eso me hace mejor y distinto.
- Ya me estaba empezando a preocupar por cual sería tu reacción, porque después de todo tu eres yo o yo soy vos, da igual... Grande winner!!!
En ese instante, una voz de mujer, preguntándole si ya está listo para salir y por qué se demora tanto, a lo que responde:
- Si, ya estoy listo, me distraje pensando boludeces. Sorry.
